La domótica personaliza las estancias de tal manera que al identificarnos puede sintonizar el dial de la radio que escuchamos con más frecuencia o encender la televisión en el canal deseado para ver la película que teníamos programada, todo esto con independencia de los habitantes que haya en la casa y sobre todo respetando los gustos y necesidades de cada uno de ellos.
De esta manera, si estamos leyendo en una sala de la casa, con un tono determinado de música y decidimos prepararnos un café en la cocina, mediante sensores de presencia la domótica identifica por dónde estamos y va encendiendo y apagando el sonido en aquellas estancias en las que nos encontramos incluso regulando el volumen de la música adecuándolo a cada una de esas estancias, ya que no es lo mismo estar en reposo en una sala que hirviendo agua en la cocina.
Así mismo, la domótica puede ir encendiendo o apagando la luz por nosotros, de modo que si tenemos las manos ocupadas, no necesitamos pulsar ningún interruptor para que la luz se encienda o se apague al entrar en las diferentes estancias de la casa y que la intensidad de la luz se regule en función de la habitación en la que entremos o incluso de la hora del día que sea, ya que si tenemos un bebe durmiendo y queremos arroparlo antes de acostarnos, al entrar en la habitación se puede encender la luz muy tenue o incluso encenderse una luz disuasoria de modo que no despierte a nuestro pequeño y todo con el mismo interruptor.
Incluso aunque no dispongas de ningun dispostivo compatible con Google Home
Ahora es tambien posible controlar una Smart Home con la voz, sin invertir en la compra de dispositivos compatibles con Google Home.
Podemos controlar la ilumiación, las persianas, estores, toldos, temperaturas y volumen de la musica, con frases como: Ok! Google